Por Ana Hernandez Robles
El 25 de enero, se celebra el Día de la
Mujer Hondureña. Este día se
celebra como una acto referencial a la memoria de la primera conquista
socio-política de las mujeres en 1955. Fue en este año que las
"Catrachas" fueron reconocidas legalmente y pudieron emitir el
derecho al sufragio. Este año 2014, se conmemoran 59 años desde el reconocimiento de
los derechos políticos femeninos que permitió a las mujeres pasar del
campo doméstico al campo político.
En la actualidad, en Honduras se han logrado pasos importantes a favor de la mujer. Por ejemplo, fue en 1997 en donde finalmente la conocida "Ley Contrla la Violencia Doméstica" fue finalmente aprobada. Esta iniciativa permitió el aumento de la protección a favor de la mujer en contra de la violencia domestica que es uno de los principales atentados en los hogares Hondureños.
La sociedad Hondureña esta plagada por la desigualdad social. Un ejemplo de esto es el informe sobre Desarrollo Humano que señala que las mujeres han alcanzado un nivel académico mucho mas alto que los hombres. Sin embargo, al final las mujeres siempre terminan sin empleo y prácticamente no son altamente reconocidas en el mercado laboral.
Realmente, uno de los cuestionamientos mas altos que debemos hacernos es que la violencia contra la mujer sigue afectando a muchas familias en la sociedad en su conjunto. Las corrientes patriarcales que influyen en el control ejercido por parte de los hombres fomentan la violencia y la desigualdad. El estado Hondureño necesita garantizar la seguridad y el acceso a una vida digna en todos los espacios donde se desempeña y vive la mujer.
En Fundación Adelante creemos en la bondad, el respeto, y la dignidad de todas las mujeres Hondureñas. Creemos firmemente que es indispensable conmemorar una fecha tan importante, en donde la lucha, la entrega, y el valor femenino pudieron en contra de los estigmas sociales y las corrientes machistas. Debido a esta lucha histórica, la participación política de las mujeres en Honduras es cada día mas protagónica.